ZONA A: UNA RÁFAGA DE GOLES SALVÓ AL MADRYN

Los vientos de siempre de la Patagonia recibieron el encuentro que más distancia recorre de esta edición del torneo, salteños y madrynenses.

Los dirigidos por Fernando Quiroz eligieron salir con línea de 5 en búsqueda de tapar los espacios que pudiesen llegar a generar los sureños que marchan punteros del campeonato.

Se veía a un equipo local con más precisión en el pase y en las subidas, frente a un Albo que buscaba salir de contra para hacer daño.

La primera fue una escalada de Pérez por derecha que se quitó con velocidad la marca de Montoya y remató cruzado potentemente, pero pudo contener Abadía con rebote y posterior despeje. 

Los primeros 15 minutos no verían más ocasiones, Gimnasia no atacaba mucho, esperaba a su rival, mientras que al local le costaba encontrarse dentro del campo rival para generar alguna ocasión de peligro. 

La visita de a poco se animaba, principalmente con desbordes, ganaba metros aunque no encontraba conexión con su centrodelantero, Renzo Reynaga.

Se fueron con idas y vueltas intrascendentes unos 30 minutos que mantenían la igualdad y la paridad, intentos tímidos de la visita y poca precisión del local de tres cuartos de cancha en adelante.

Transcurrían los minutos, se veía un partido chato, con leve crecimiento en la posesión para el Millonario Salteño, aunque pocas emociones que resaltar.

El Albo sufriría la facilidad de sacar tarjetas del árbitro Monzón Brizuela, recibió tres amonestaciones en la primera mitad cuanto menos cuestionables algunas, las mismas fueron para Ivo Chaves, Nicolás Rinaldi y Gabriel Díaz (que llegó a las 10 cartulinas amarillas y se perderá dos encuentros por sanción).

Poco para ofrecer tuvo el primer tiempo, ninguno gravitó, ninguno arriesgó y por eso el descanso terminaba 0-0.

El complemento arrancó muy parejo, con los dos equipos queriendo asomarse más al área rival, aunque con sus defensas firmes para tapar las subidas de los puntas de ambas escuadras.

No realizaron modificaciones en los primeros 10 minutos y el trámite de juego era parecido al de la primera parte. 

Los centros Albos eran malos, sin receptor, encontraba espacios para adentrarse en campo rival pero nunca aprovechaba las posibilidades.

Los de Quiroz recibirían otro golpe duro, tarjeta amarilla a los 15 del complemento para Guanini, que llegaba a las 10 tarjetas y también se perderá los próximos dos encuentros del Albo.

Habrían cambios en ambos partes, en Madryn saldrían Martínez y metería a Montagna, mientras que Gimnasia y Tiro quitó del campo a Reynaga y Méndez para que jueguen Gordillo y Rojas.

La primera que tendría Lautaro Gordillo sería al instante que ingresó, pelotazo de Villalva, cae sólo Postel, el central izquierdo local y queda el delantero salteño mano a mano y de sobrepique remató fuerte por arriba del arco desperdiciando una gran chance.

De a poco Gimnasia ganaba terreno en campo rival, la energía de Rojas ayudaba para escalar metros y con un Madryn confundido, que dejaba espacios para Gordillo que con su movilidad generaba pequeñas ocasiones que eran llamados de atención para los dirigidos por Gracián.

En el mejor momento del Albo, Solís aprovechó un descuido defensivo visitante, escapó por derecha y sacó un centro preciso para que Ribero se arroje con el pie adelante y convierta un golazo para poner el 1-0 para el local a los 75. 

Metió variantes post gol Teté Quiroz, optó por Contín y Galetto en lugar de Villalva y Tallura, rompiendo la zaga de 3 centrales.

De un lateral de Sosa a los 79, Sosa encontró un hueco para jugar con Pérez sobre la izquierda, se dormía Montoya y el volante sureño se quitó la marca de Gabriel Díaz y fusiló a Abadía para meter el 2-0 para los locales.

Una ráfaga de goles liquidó al Albo, dos golpes inesperados que sacudieron la resistencia salteña, dejando casi sin respuestas al equipo.

El Deportivo Madryn tras el gol metió a Mansilla y Maná en lugar de Pérez y Silba para cerrar el resultado.

Los minutos finales se vería un equipo salteño timorato, abatido por el resultado que no era el esperado, los cambios no fueron efectivos y no pudo reencontrarse en cancha.

Los locales se relajaron, su gente metió una fiesta de humo para celebrar, saben que la final está muy cerca, sus jugadores también, no se desesperó y esperó al final del encuentro. 

Así fue el desenlace el compromiso, Madryn ganó con su contundencia en la segunda parte, aprovechó dos errores de los salteños y se quedó con una victoria importante para seguir en la cima.

La próxima jornada el cuadro sureño visitará a Deportivo Maipú, mientras que el Club de Salta recibirá a Alvarado